Protección
Revista Tendencia julio 2012 | Fuente Miguel Cisterna Tricólogo
Cambios de temperatura
El cuero cabelludo como parte de la piel tiene una expresión de acuerdo al tiempo, el clima y medio ambiente. En invierno, el cuero cabelludo tiende a tener estímulos muy encontrados, sobre todo en las grandes ciudades debido a que hay variación muy drástica entre la temperatura del exterior, la de los hogares, y las oficinas.
Debido a estas variaciones, la piel no recibe un mensaje claro y como consecuencia, es común que en esta época surjan afecciones derma-cosméticas por cambios de temperatura. Lo mismo sucede con el cuero cabelludo, ya que esos cambios bruscos no le permiten equilibrar sus respuestas a los estímulos produciendo, por ejemplo, pasando de resequedad a extrema oleosidad en pocas horas.
Esta situación se replica en el pelo lesionándolo, y en consecuencia se verá con:
•
Puntas florecidas: porque las cutículas se tienden a abrir.
•
Pérdida de brillo: al estar resquebrajada la cutícula, el pelo pierde su brillo
porque la luz no se puede reflejar.
• Mayor
frizz: por la fricción que genera las cutículas resquebrajadas el pelo tendrá
mayor estática.
Humectación para tu cuero cabelludo en invierno
Ante estas manifestaciones, lo recomendable para el cuero cabelludo y el pelo es elegir productos que no alteren sus propiedades naturales.
Por ejemplo: formulados con minerales, libres de parabenos, libres de siliconas, libres de colorantes, que sean hipoalergénicoas y testados bajo control dermatológico.
Algunos pueden incluir el aceite de almendras que posee un gran poder humectante e hidratante sumamente sano y natural que abunda en beneficios para todo tu organismo, pero sobre todo para tu piel. Y por ende, para tu cuero cabelludo y pelo también.
El aceite de almendras se caracteriza por:
• Poseer propiedades, hidratantes, suavizantes y proteicas que regeneran el equilibrio natural del cuero cabelludo.
• Ser
una emulsión humectante que limpia sin producir raspado ni irritación.
•
Permitir - si el cuero cabelludo está naturalmente hidratado- retención de agua
formando una capa protectora.
• En la fibra capilar, restaurar la ausencia de brillo.
Otros pueden incluir miel y aminoácidos, la cual actúa como nutriente, emoliente y texturizador natural de la fibra capilar. Posee además propiedad antiinflamatoria, antiséptica y relajante.
Claves para una melena sana
Conocer la realidad del pelo. La realidad del pelo se determina en función del cuero cabelludo y la fibra capilar. Para determinar los cuidados, o del pelo o del cuero cabelludo, hay que conocerlos a ambos. Y para ello, hay que analizar los estímulos que reciben, los cuidados que se les da y el ciclo hormonal del organismo.
a) No sobreestimularlo. Es decir, no abusar de ningún estímulo perjudicial para el cuero cabelludo y la fibra capilar prestando especial atención a los cambios bruscos de temperaturas.
b) Cuidado con los procesos extras. Recordar que todos los procesos físicos o químicos que se le hagan al pelo (alisados, permanentes, brushing, extensiones, secador, planchita, bucleadora, etc.) tendrán réplica en el cuero cabelludo.
c) Usar un sistema de HIGIENE y NUTRICION, para ello el Shampoo y Acondicionador. En todo sistema, el shampoo provee la limpieza, pero al momento del enjuague gran parte de sus propiedades se van con el agua. Por eso luego del lavado hay que utilizar el acondicionador o balsam de la colección, que sellará la fibra en los lugares donde se necesita, evitará el roce y aumentará la peinabilidad del pelo, permitiendo una actuación posterior de las propiedades del producto.
d) La alimentación y la vida sana van a hacer que tengan una mejor respuesta frente a los estímulos del invierno.
e) La hidratación, siempre olvidada y muy necesaria también en esta época del año.
f) Usar productos con certeza científica en el desarrollo y en el resultado. Estos se reconocen con una formulación rica en minerales, libres de parabenos, de siliconas, de colorantes, que sean hipoalergénicoas y estén testados bajo riguroso control dermatológico.
Copyright revista Tendencia julio 2012 | edición 89
Copyright CABELLOySALUD ®